No pretende ser una serie abstracta, sino
que los personajes adquieren la forma simplificada de luna menguante o
creciente, intentando con esta simplificación realzar su expresión
corporal formando parejas o familias.
La luna tiene mucha influencia y relación con nuestras vidas. Ha
sido siempre un elemento mitológico, misterioso, cambiante, intrigante
y mágico. Da luz en la oscura noche y cada día cambia de
forma y de horarios.
Viendo esos otros planetas que poseen varios satélites, haciendo
un guiño al personaje del principito, los imagino aquí formando
parejas, uniéndose en diferentes posiciones de contacto físico,
familias donde aparecen los pequeños retoños todavía
unidos a sus progenitores, o solitarias en posiciones relajadas.
Juego de lunas VI
Familia de lunas I
Juego de lunas I
